■ Seguro de responsabilidad civil:
Este tipo de póliza cubre los daños causados a terceros en caso de accidentes. Es obligatorio en muchos países y es fundamental para proteger tus activos financieros.
■ Seguro contra todo riesgo:
Esta póliza ofrece una cobertura más amplia, además de la responsabilidad civil. Protege tu vehículo contra daños por colisiones, robo, incendio y otros eventos no esperados.
■ Seguro de motocicleta:
Específico para motocicletas, esta póliza ofrece cobertura tanto para la motocicleta como para el conductor. Puede incluir protección en caso de accidentes y robo.